Ojitos color magia

Esta habitación no hace más que suspirar tu nombre enamorada. Mi techo dibuja nubes que cuentan nuestra historia de aquél día de suerte en que un trébol de cinco hojas juntó nuestras miradas, detuvo mi respiración, aceleró tus latidos y unió nuestros fururos.

Mis paredes han escrito tu nombre en todas partes como bandera que ondea alto en señal de victoria, han colgado cuadros, han dibujados soles y galaxias inspirados en tu risa.

Mis canciones bailan por toda la habitación recordando tu voz y soñando despiertas con tus besos. La puerta no deja de chirriar tu nombre anhelando ansiosa el sonido de tus pasos que vuelven.

Mi cama se recuesta a recordar todos los mundos que incendias al besar, todos los mares que inundas al amar.

Y yo, yo he vuelto a vestirme de flores y estrellas; he vuelto a pintarme la primavera en la sonrisa; he vuelto a soñar felicidad.
Yo, he vuelto a cantar ilusiones, a hundir imposibles, a surcar cielos de esperanza, a navegar en el océano del amor.

Yo, mi amado ojitos color magia, he vuelto a ser feliz desde el día en que tú me miraste, porque me besas y a mí me pasan dentro mil atardeceres.