Entre letras, vino y nostalgia

No sé, quizás aquí haces falta y es por eso que me niego a iniciar una nueva historia llevándome de protagonista, pero es que es difícil querer volver a intentar cuando ya una vez, soñando, lo has perdido todo.
Te escribo esto con las mismas manos que una vez besaste pero ya no soy la misma; es que tu partida fue un terremoto que me sacudió hasta los cimientos y al ver que se me caía la casa encima tuve que sacar solo lo importante, y tendrás que disculparme pero solo me saqué yo, dejé el resto dentro, hasta tu recuerdo. Aunque te confieso que el amor que te tenía, ese bandido escapó conmigo, y sigue aquí, palpitándome en el pecho pero ya no duele, hoy es canción.
Y pienso que ese es el problema con otras personas, se aferran al recuerdo pero en lugar de sonreír lloran porque les duele y no creo que de eso se trate la vida, pienso que hay que seguir recordando pero sonriendo. Pero ya sabes, yo creo hasta en la magia de una estrella, y en este preciso instante, con una botella de vino acabada y otra por iniciar, comienzo a creer que la magia está en la música, o quizás en esta habitación vacía que me ha visto tantas veces llorar y derrumbarme y aún así se ha quedado.

Qué sé yo, ya me lo decías tú, sigo siendo una niña que piensa que todas las historias pueden tener un final feliz, y a eso tú le llamabas locura, pero ya sabes, ya lo dijo Bukowski “Alguna gente no enloquece nunca. Qué vida verdaderamente horrible deben tener.” Y mi vida al menos aún sueña, ríe y quiere volar.

Y aquí en compañía de tu canción favorita entiendo completamente a Sénder cuando comparaba la pequeñez de sus manos con todo lo que la vida quiso darle, sólo que en esta casa solitaria la pequeña soy yo y la vida es el mundo que está allá afuera abucheándome porque he dejado una obra inconclusa, una representación que le demuestre que sigo en pie y con las armas empuñadas, con una sonrisa de malicia y con las botas puestas.
Pero quédate tranquilo, que tú sabes como soy, en cualquier momento voy a darles lo que quieren pero por ahora prefiero pelear mis propias guerras de dentro en solitario, porque se sabe que de ningún laberinto propio se sale con llave ajena.

Ni sé porqué te escribo si sé que ya no me lees pero siempre está la esperanza de que sin importar donde estés y que estés haciendo, sientas por un breve momento que el mar te susurra al oído que yo estoy de este lado, ahogada hasta la cintura, pensándote.

Pero tú sonríe, aprovecha los días como decía Roch, que yo ya acabé de vomitar todo el dolor y ahora viene el trago dulce de un nuevo inicio, y fíjate que no hablo solo del vino, que por cierto, me ha llenado la garganta de un recuerdo a celebraciones pasadas; te hablo de un nuevo intento que te da una nueva esperanza.
¡Ah!, ya sé lo que te estarás preguntando; te debes preguntar si he conocido a alguien que me está volviendo a enamorar, y la respuesta es un rotundo sí; me estoy ilusionando otra vez y como nunca, estoy desencajada, consternada y extasiada; sí, mi pequeño, me he vuelto a enamorar, de la sonrisa que me seduce frente al espejo, de esta nueva persona que ahora soy.

Tercera botella de vino pero estoy pensando en no beber más porque las metáforas ya están saltando de nuevo y amenazando con hablar de ti como si te extrañáramos, como si aún le pidiéramos al cielo antes de dormir que estés bien, como si aún dejara la puerta entreabierta por si pudieras volver. Ni se lo que digo, ya lo ves, culpemos al vino y a la música insinuosa que te trae de regreso como llovizna.

En este punto podría armarte una tesis completa contradiciendo a Nietzsche porque llegué al punto en el que me amo de forma saludable y me soporto pero aún así vagabundeo, y todo por culpa de un recuerdo que se vuelve a colar entre el vino, la música y las estrellas, pero irónicamente, niño, no es un recuerdo tuyo, sino mío de cuando estaba contigo.
Pero por ahora mejor voy a silenciar las manos y a seducir mis pensamientos para que callen y me dejen seguir bebiendo.


29 respuestas a “Entre letras, vino y nostalgia

  1. |~…que manifestación cada línea, ese ir y venir, con la cadencia de un verso en remojo de nostalgia en la frescura del vino añejo/~gusto al paladar … la conjunción de la esencia como amor propio/~ te quise/~ me quiero~ … te espero/~ me espero~… un acertijo emocional, donde te descubres eterna con los autores citados, con la magia de poseer la clave para salir airosa del laberinto interior. Un musical que no deja, de ser un viaje hacia lo sentido y amoroso…, sin olvidar la grandeza de no perder la sonrisa como método de sobre~vivencia…. sin duda cualquiera puede verse reflejado en parte de tu escrito…!~ /agarra tu Estrella siempre, para que palpite con grandeza~
    ¡Buenas energías!~

    Le gusta a 1 persona

      1. El presidente no ayuda para reducir mi estrés. Pero estoy curtido y puedo sobrevivir viviendo un poco al margen del eterno vaivén argentino. En este nuevo blog mío me radicalicé, y aparecieron algunas personas, como tú, con las que puedo tocar algunos temas esenciales usando un código que me es familiar. Eso me ayuda, he estado unos meses bastante estancado en el Alprazolam. Continuará…

        Le gusta a 1 persona

          1. Mi historia con psicofármacos es larga. No extrema, «sólo» paralizante.
            También pasé un año con antidepresivos. Sobre ellos, la Deutsche Welle emitió un excelente reportaje, «Muerte por receta». Algunos psiquiatras honestos admiten sus dudas sobre los efectos. Cuentan que uno de los posibles efectos colaterales es, curiosamente, el aumento de las tendencias suicidas. Y con cámara oculta un periodista visitó a algun@s psiquiatras, que tras hablar menos de 5 minutos le recetaban antidepresivos como si fueran aspirinas.
            Misteriosamente, el documental fue eliminado. Les pregunté a DW (Latinoamérica) por qué y jamás me respondieron.
            Afortunadamente alguien lo rescató y volvió a subirlo. Por si te interesa verlo, te dejo la dirección.
            Que tengas un buen día.

            Le gusta a 1 persona

      1. Puedo imaginármelo.
        Yo me había hecho un acumulador, figurada y literalmente. Tratando de decidir las cosas valiosas que podría rescatar del montón se me fueron algunos años. En algún momento tomé envión y tiré grandes bolsas sin preocuparme por su contenido, figurada y literalmente. Un gran consejo que me dio una colega tuya fue: «si no te ha servido para nada en un año, tíralo».

        Le gusta a 1 persona

  2. El amor, como el vino, tiene bastante graduación, nos atrapa y nos conduce por inconcebibles rutas en otro tiempo. Primorosa espiral de sentimientos que dicen olvidar pero no lo sienten.
    Hace tiempo que prefiero amar sin alcohol 😀 , – por el hígado- si me permites la metáfora en clave de broma. Ahora en serio: enhorabuena, es muy bueno y espero que detrás del texto haya alguien feliz con su aprendizaje. Un saludo.

    Le gusta a 1 persona

  3. ¡Hola, Primvers!

    Primero que nada, quiero decirte que no sé cómo me he dejado caer por esta maravilla de rinconcito, pero me encanta haberlo hecho. Muchas gracias por compartir con los que te leen tanta magia, tus palabras están cargadas de belleza y cuesta descubrir blogs tan auténticos en este mundo de WordPress. En serio, me encanta.

    En cuanto a la entrada, ¡brutal! Es una maravilla que consigas transmitir tanto con tus palabras, no es nada fácil hacer algo así en los tiempos que corren… Me he sentido muy identificada con algunas de tus palabras y has conseguido emocionarme, así que muchas gracias por eso.

    Solo me queda decirte, de nuevo, que ha sido todo un placer haber llegado hoy a este precioso rinconcito. Puedes encontrarme en WordPress como Miss Poessía si te apetece, pero vamos, que ninguna obligación. Yo, con haberte descubierto, ya estoy muy contenta.

    Un abrazo ♥

    Le gusta a 1 persona

Deja un comentario